"EL ABC DE LA FELICIDAD".

Desde niña, siempre me ha fascinado recibir como regalo un libro. Me muestro muy agradecida por ese presente, que al momento de tocar con mis manos, acaricio y trato con delicadeza, (como a un bebé en apariencia delicado), preguntándome que será lo que tenga para ofrecerme.

Cuando un libro cae en mis manos, lo observo con detenimiento, lo miro y remiro, como a un auténtico desconocido al que pienso ir descubriendo poco a poco, página a página. He leído por ahí, algo así como "que un@ no escoge a los libros, sino que son éstos los que te escogen a tí". Me gusta pensar que es de esta manera...y por tanto, cuando un libro llega a tu vida es para contarte algo. Es un "tesoro".

Hoy me siento feliz por revivir nuevamente esa sensación tan conocida para mí, por otro lado difícil de describir... No hay prisa, primero el tacto: Lo manejo, le doy vueltas, aprecio la textura, lo miro en su portada, me detengo en la parte posterior, lo huelo, olfateo sus páginas interiores, le tomo el peso... Pensarás que soy una exagerada, pero siempre he soñado que de no dedicarme a la radio como locutora (un privilegio para mí, por ocupar parte de mi tiempo y de mi vida a hacer algo que me gusta) otro oficio en el que me pasaría horas y horas desparramando y gastando la vista sería trabajar en una biblioteca o librería... ¡Vamos que me invitaría yo misma "a echar una manita" y lo haría encantada!

Bueno, bueno, antes de que pienses que deliro... Quiero agradecer el regalo de un volumen grueso de 872 páginas que acabo de recibir y que me hace sentir FELIZ, porque ya tengo un compañero con el que pasar buenos ratos y horas de lectura para este verano 2009.

El título es: "El ABC de la Felicidad" de Lou Marinoff estudioso de filosofía en Londres y Jerusalén. Actualmente es profesor en una prestigiosa universidad de Nueva York. Puede que te suene su nombre porque en 1990 se dió a conocer con la publicación del best-séller "Más Platón y menos Prozac", traducido a numerosos idiomas.

Ávidamente he leído sus primeras páginas que las dedica a Agradecimientos que son numerosos y realiza una introducción que ya promete en cuanto al contenido. De momento, encuentro muy atractiva la forma en la que expresa sus ideas y la redacción del texto.

Como curisosidad te puedo adelantar, que cuando hace referencia al "ABC" de la felicidad, se está refiriendo colectivamente, ni más ni menos que a los filósofos: Aristóteles, Buda y Confuccio que enseñaron formas de eliminar el sufrimiento innecesario, de guiar a los seres humanos para que pudieran realizarse como personas, conocerse interiormente y convivir socialmente en armonía. Todos ellos reconocieron que el extremismo destruye la felicidad, la salud y la armonia. Los filósofos "ABC" también tienen otra cosa en común: la noción sumamente importante de que el principal propósito de estar vivo es llevar una "vida buena", aquí y ahora. Sus diversas teorías y prácticas están concebidas para generar bondad en este instante, y en el otro, y en el de más allá...

Los filósofos "ABC" no tienen interés en las vidas pasadas ni en las futuras. Se ocupan de los cielos y los infiernos que creamos para nosotros mismos y para los demás aquí en la Tierra, a cada instante. Enseñan que si uno ejerce debidamente el considerable poder que posee sobre este momento de su vida, lo bueno se manifestará para sí y para los demás.

¿A que resulta apasionante?... Mejor me detengo aquí, que si no ya me conozco, y la brevedad precisamente no es mi fuerte...

Tampoco es plan desgranar una historia que posiblemente te apetezca descubrir también a tí en primera persona.

Este verano lo paso con Lou Marinoff

- ¿Y tú?...

Un abrazo refrescante (por eso del calor),

Eu